Levantarte tempranito, desperezarte despacio, sin prisa. Coger un jersey y bajar a desayunar. Abrir la puerta y encontrarte con un precioso día soleado, que te saca una sonrisa mientras te restriegas los ojos aún medio dormidos y deslumbrados por la claridad. Tomarte un colacao con tostadas con una suave conversación con la gente y tener ese presentimiento de que, aunque tengas que inflarte a estudiar, hoy va a ser un buen día :)
No hay comentarios:
Publicar un comentario