jueves, 26 de enero de 2012

¿Mañana? ¿Qué mañana?


"Juntos vamos a adueñarnos de la ciudad.

Cada vez que una chica quiera vengarse de su novio,
ESRAREMOS ALLÍ

Cada vez que una chica quiera resolver sus problemas con papa mediante la promiscuidad y la bebida...
ESTAREMOS ALLÍ

Cada vez que un grupo de solteras se desplace por la ciudad en una limusina sacando la cabeza por el techo gritando "Qué pasa Nueva York!!"
NOSOTROS SEREMOS LO QUE PASA EN NUEVA YORK.

Caballeros, estamos a punto de embarcarnos en un evento que nos reunirá bajo unas señas de identidad, una élite.
Poneros traje."


(Cómo conocí a vuestra madre).




martes, 17 de enero de 2012

Te quiero sis :)

Porque a pesar de todas las peleas, discusiones y tirones de pelos, eres tan adoreibol que te como :)

lunes, 16 de enero de 2012

Expresar emociones

Tan simple. Tan difícil. Tan fácil. Una tontería. Un mundo. Con forma de palabras que escapan de tu boca antes de pensarlas o que quedan atascadas en la garganta, estancadas en lágrimas o congeladas en sonrisas. Dentro dando vueltas queriendo salir o fuera queriendo entrar. Tantas emociones encontradas, compartidas, complementarias, no correspondidas, rebeldes, que se escapan, incontrolables, sin sentido ni razón.. Tantas emociones, tantas expresiones, que a veces es complicado hasta saber cuál es la que sentimos.


Emociones convertidas en canciones, en miradas, en temores, en olores que se escapan. Emociones que decoran donde se esconden encerradas en prisiones con muy poca vigilancia. Emoción por despertar las emociones, por desvelar las emociones, que recorren mi cabeza, liberar las emociones desafiando la vergüenza. Emociones, refugio de soñadores, bandera de desertores cuando faltan las palabras. Emociones que fabrican ilusiones inventando los colores como por arte de magia. Emoción por abrir el corazón, emoción sin ninguna condición, como forma de expresión sin oponer resistencia. Emoción por sentir una emoción, sin temer la reacción, sin que exista una razón, ni pedir explicación, reclamando la atención, exigiendo comprensión y sentir la ligereza...

sábado, 14 de enero de 2012

Y que después de todo, simplemente...

Hablar con un buen amigo y convertirme en una sonrisa andante :)
Por toda esa gente que siempre termina por alegrarte el día, por muy feo que esté 

Gracias J, al final siempre consigues que me encuentre en mi propia histeria y frustración momentáneas y vuelva a ser el pingo feliz de siempre. Eres de lo mejorcito que hay sobre la faz de la tierra, que lo sepas :)

Tengo un día raro

Un día de esos que estás como bien pero susceptible. Como... raro. Que mejor que me dejes a mi bola, a mi aire, porque estoy en ese punto de que como me sigas tirando de la lengua viperina que tengo en este momento te voy a terminar pegando un bufio y diciéndote un par de verdades duramente dichas. Aparentemente tranquila, pero sólo es una tranquilidad que pende de un hilo. Hoy no ladro, pero muerdo.  

Yo creo que a mi estudiar no me sienta bien, realmente lo creo, me resulto insoportable hasta a mi misma, molestándome por gilipolleces. Pero qué le vamos a hacer, no lo puedo evitar, aunque te aseguro que lo estoy intentando.

jueves, 12 de enero de 2012

ffu!

Que me jode mucho que me mareen. Que sí, que no, que tal, que cual.. No, las cosas claras y el chocolate espeso. Que si te parece bien lo dices y si no pues también, pero no estés con el quizás hasta el último momento, para luego decir que no, hacer lo que te de la gana y que todo el mundo tenga que cambiar sus planes por ti. Y si no es suficiente,  luego están las verdades a medias, y el te empiezo a contar una cosa, pero no la termino. Pues si empiezas y sabes que me voy a terminar enterando, pues ya que estás, acabas. Y si no pues te la callas, y no me tienes preocupá por el final ese que se supone debo adivinar o algo. ¿Tan dificil es decir las cosas tal y como son de primeras?¿Tanto cuesta? De verdad que me sacais de quicio --"

miércoles, 11 de enero de 2012


Hablo de esos momentos de agobio en los que te bloqueas y ni pa'lante ni pa'trás, que una tontería parece un mundo y te dan ganas de correr en círculos chillando lo más fuerte que puedas. Que simplemente te colapsas y empiezas a crear montañas de granos de arena. Después, cuando lo piensas tranquila, sin presión ni hormonas locas de por medio, te das cuenta de la gilipollez tan grande que era. Por eso, aunque sé que pocas veces lo consigo, intento mirar los problemas con perspectiva, desde fuera, porque muchas veces la solución es tan evidente que no somos capaces de verla. Y es por eso que, cuando no somos nosotros los implicados, vemos cientos de sencillas resoluciones, porque no tenemos esa cosa dentro que nos impide pensar clara y racionalmente ni nos dejamos llevar por sentimientos, emociones e impulsos. Sin embargo, muchas veces, cuando eres tú el protagonista, te enfrascas tanto en darte calamonazos contra una puerta cerrada, te empeñas tanto en pasar por ahí, que no ves la ventana abierta de par en par que hay justo al lado.



martes, 10 de enero de 2012

Matices importantes

Hay muchos tipos de frases, distintas maneras de ordenar las palabras que hacen que te des cuenta de que, muchas veces, no importa lo que digas, si no como lo digas. Nada más lejos de mi intención que restarle importancia al contenido, solo quiero resaltar la propia que tienen la misma forma en sí. En un primer momento se puede pensar que es una gilipollez, que más relevancia tienen el significado y la intención, pero al fin y al cabo es la misma. Por ejemplo, no es igual decir "Estoy hasta los co***** de ti, déjame en paz" que "Me estoy agobiando, lo siento pero necesito un poco de espacio". La reacción que provocan ambas frases puede ser bastante diferente, siendo el contenido y la intencionalidad idénticas. Así que antes de hablar tenemos que tener en cuenta todo, incluidas la entonación y las palabras, es decir, la manera de decirlo, especialmente en asuntos delicados o importantes. De ello puede depender obtener el "sí" o el "no" en cualquier cosa o hacerle más o menos daño a una persona. Por ello, es esencial aprender a medir nuestras palabras, pensarlas bien, porque una vez que hieres a alguien, el daño ya está hecho, por mucho perdón que pidas y por cienmil veces que te perdonen. 

Sin embargo, no es todo negativo, porque al igual que pueden hundirte, las palabras, las oraciones, tienen también el poder de dejarte sin aliento, hacer que el aire salga de tus pulmones en forma de suspiro y sumirte en una nube de felicidad que hace que, inevitablemente, aparezca en tu cara esa boba sonrisa. Frases dichas en el momento adecuado con la forma perfecta que pueden transformar un ceño fruncido en unas comisuras elevadas y un par de sonrosados coloretes, calmando el mayor de los enfados y alegrando el corazón más triste. 

 El quid de la cuestión está en encontrar esa combinación de palabras en ese segundo y con esa persona, lo que, desafortunadamente, no siempre es fácil. Pero no preocuparos, es algo que, como todo, se puede ir adquiriendo con práctica, tan sólo se trata de pensar bien qué vamos a decir y que impacto podemos causar con ello en los demás. Mi consejo, si me lo permitís, es que no olvidéis ese gran poder de las palabras e intentéis meditarlas siempre que os sea posible, porque a veces puede ser enormemente decisivo y, realmente, no requiere tanto esfuerzo dominarlas.  

Yo me quedo con la última frase que me han dicho en ese momento adecuado y con las palabras idóneas, que quizás fuera de contexto no tenga sentido, pero que a mi en ese instante de pique me tocó la fibra sensible y me sacó esa sonrisa tonta: "Tu eres mi Scarlett"

^^

lunes, 9 de enero de 2012

Le return a la rutina

Que rápido se acaba lo bueno. Hace un parpadeo era 23 de diciembre, empezaban unas vacaciones aparentemente largas, llenas de turrones y cenas en familia, y apenas un segundo después PUM! estamos a 9 de enero, lunes de depresión post-vacacional, con dolor de cabeza aguantando al profesor cabroncillo de turno. Y para colmo, nosotros universitarios, comenzamos un mes estresante, lleno de entregas de trabajos, actividades y exámenes, los cuales nos arrepentiremos con creces de no haber empezado a estudiarlos en Navidad. Pero bueno, que no cunda el pánico, hay que tomárselo con tranquilidad y paciencia, pensando en positivo. Por ejemplo, yo no pierdo de vista esos carnavales de Cádiz que me esperan, ni la semana de vacaciones tras las notas, ni la fiesta que me voy a montar cuando acabe. Quizás no sobrevivamos, pero al menos lo habremos intentado. Amigos y amigas, preparad cafés, apuntes y un gran surtido de subrayadores, porque ahora empieza lo bueno...