La comprensión y el entendimiento entre dos personas reside en algo mucho más profundo que una lengua. Existen mil y un matices que condicionan cada frase que decimos, un simple gesto, una mirada, el tono de la voz. Cada cual tiene su particular forma de expresarse, su propio idioma que hay que aprender a entender para una adecuada comunicación.
Hay gente que grita con un silencio, gente que calla con una mirada, y gente que habla con una exhalación. Y es muy dificil identificar cada uno de estos matices adecuadamente y comprenderlo. Porque a veces las palabras sobran y otras veces las palabras faltan. Unas queremos decir mil cosas a la vez y otras no sabemos que decir. Ira contenida, sonrisas mal disimuladas y miradas poco discretas. Mirar más allá de lo que se dice y escuchar algo más que palabras, penetrar en un rico mundo de sensaciones y emociones contenidas debajo de la piel.
Impulsividad. Esa palabreja que se define como que se deja llevar irremediablemente por sus impulsos o instintos. Posiblemente yo sea una persona impulsiva. De ésas que a veces toman decisiones en el último momento por una corazonada. De ésas que no les importa cometer una locura si lo sienten así. De ésas que no importa cuanto racionalicen las cosas, porque al final hará lo que le dicten las entrañas. Capaz de jugarselo todo a una sola carta o tirar la mano. Que confía bastante ciegamente en su intuición en la mayoría de los casos y que acaba haciendo lo que siente. ¿Bueno? No se si lo será del todo, a veces hay que pensar las cosas un poco más, pero otras un poco menos, porque cuanto más las piensas más te lías y peor es. 
Me gustaría tomarme un café contigo. Hablar de todo un poco, temas banales, quizá algún recuerdo no demasiado doloroso. Saber cómo estás, qué es de tu vida, si sigues siendo el mismo. Si soy la única que se acuerda todos los días de esos momentos y si hay aún alguna esperanza para esa vieja amistad. Supongo que sólo necesito un par de respuestas para pasar totalmente de página y dejar de mirar las letras al trasluz. Supongo que solo necesito un café contigo.
