Intocable.

La vida está llena de problemas, baches en el camino que tenemos que ir aprendiendo a sortear. Piedras con las que tropezamos, obstáculos. Los hay ahora y siempre. Muchas veces son imposibles de evitar, nos hacen pasarlo mal y de vez en cuando hacen falta más de un par de bofetadas para volver a levantarnos y seguir nuestro camino. Lo importante, sin embargo, no es caerse, sino saber levantarse, hacerlo una y otra vez, siempre aprendiendo del error, intentando no volver a cometer el mismo luego. 

Cuántas veces nos hemos quejado de nuestra vida y cúantas veces más lo haremos, sin pensar que hay gente mucho más jodida (con perdón) que nosotros, y que tiene que pelear con el mundo día a día para salir adelante. 

A algunas personas le cambia la vida de un día para otro, pasan de estar en lo más alto al fondo en un instante, porque cuanto más alto vuelas más grande es la caída, pero bien merece muchas veces la pena saber lo que es estar en las nubes, aunque luego tengas que bajar a poner los pies en la tierra. Y hay que seguir intentándolo, una y cienmil veces más, no importa lo que pase, siempre quedan razones para sonreir, para vivir, para ser feliz. Siempre hay algo que tira de nosotros, sólo hay que mirar en la dirección y a través del cristal adecuado. Porque no es que tenga ningún color la vida, sino que somos nosotros la que la pintamos de colores.