Elle :)

A veces me pregunto cómo una cosa tan pequeña puede ser tan grande. Porque parece una chorrada, pero quien tenga mascota me entenderá. Y es que cuando te miran con esa carita no le hacen las palabras para hablar. En seguida notan cuando te pasa algo y no se separan de ti, no hay mejor forma de levantarse y ver la energía que tienen por las mañanas. Da igual que estés guapo, feo, desgreñado o recién levantado, te mueven el rabo igual. Que a ella no le hace falta boca para decirlo ni a mi oídos para entenderla, porque hasta que no tienes un perro no entiendes hasta qué punto se echan de menos... 

Primavera trompetera

Me encantan esos primeros días de sol en los que empieza a notarse el familiar calorcito del verano. Esos días en los que se nota en el ambiente la llegada del buen tiempo. La gente empieza a salir más a la calle, se alargan las horas de luz, hay más buen rollo, más positividad bailando en sonrisas deslumbrantes. Vuelven las gafas de sol y los pantalones cortos. Tumbarse al Lorenzo. Ir a la playa. El morenito. Colores que inundan cada rincón. Sangre que se altera. Aire libre. Bullicio. Cerveza fresquita. ¿Qué más se puede pedir? 

Somewhere I belong

Todo el mundo necesita encontrar su sitio. Un pequeño hueco en la sociedad en el que encaje, un entorno en el que se sienta aceptado, a gusto con lo que le rodea. Unos lo encuentran en un equipo de fútbol, otros en un videojuego friki, y otros en el fondo de un cubata. Simplemente hace falta un nexo de unión, da igual si es un hobbie o un grupo de música, lo de menos es el dónde o el qué. El fin es el mismo: sentirnos apreciados y valorados por los demas. Ser alguien. Importar. Llámalo X. Un sitio en el que sepan nuestro nombre y noten nuestra ausencia. Dónde nos escuchen y tengan en cuenta. Es lo que nos hace sentirnos útiles y da sentido a nuestra existencia.  Todos lo buscamos, sin excepción, muchos durante toda su vida sin encontrarlo. Lo buscamos porque está en nuestra esencia, somos seres sociales, nos guste o no, y necesitamos sentirnos importantes para poder alcanzar la felicidad.

Shut up

Nunca he sido de callarme las cosas. Al menos, en general, prefiero dejar que fluya y hablar cuando siento que tengo que hacerlo. Sin embargo, hay veces que tienes q meter lengua en paladar, sonreír y asentir con la cabeza. Y suele pasar que cuánto más quieres gritar, más tienes que callar.  No se si por mi, por el, o por el bien común. Sólo se supone que es lo mejor para todos, por lo menos a la larga. Pero joder, no veas como me cuesta...